Fuertes acusaciones golpean a la residencia Cumbre del Mar, hogar de menores ubicado en el sector de Recreo en Viña del Mar, gestionado por la Fundación del Instituto de Capacitación y Especialización Padre Hurtado (Iceph). Según testimonios de denunciantes ligados a la institución, el centro estaría enfrentando una serie de situaciones irregulares que afectan gravemente el bienestar de sus residentes.
Entre las acusaciones más graves se menciona la falta de alimentos para las 17 niñas y adolescentes que viven en el hogar, así como el consumo de marihuana dentro de las instalaciones. Además, se han reportado episodios de agresiones entre las menores y hacia el personal, acoso laboral, autoagresiones de las internas y un caso donde una tutora habría llegado al centro en evidente estado de ebriedad, lo cual habría sido justificado por la jefatura ante las menores asegurando que la trabajadora “estaba poseída”.
Una de las denunciantes, quien prefirió mantener su identidad en reserva, describió la situación como caótica e insostenible: “Acá es tierra de nadie, hay negligencia y desidia. Cuando hay episodios de crisis y estando las tutoras solas, el equipo técnico nunca llega a hacer un turno ético. Hay niñas que se lanzan por la escalera, se autolesionan; y si no intervienen las tutoras, podría haber ocurrido hasta una muerte, porque al pelear se bloquean y son violentas”.
La gravedad de estas declaraciones ha generado inquietud en la comunidad local y en organismos de protección de la infancia, ya que este tipo de situaciones vulneran los derechos fundamentales de las menores. Las autoridades aún no se han pronunciado sobre el caso, pero se espera que se tomen medidas para investigar y asegurar el bienestar de las menores bajo el cuidado del hogar Cumbre del Mar.